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Desde que estoy en los caminos de Dios, mucho he escuchado que la mente es un campo de batalla, el parque recreativo del enemigo. Y a lo largo de los años he comprobado cuanta verdad hay en esa gran afirmación; pues muchas de las batallas que espiritualmente peleamos contra nuestro adversario el diablo, tienen lugar en la mente, en nuestra mente.
El enemigo nos ataca constantemente, mandando a nuestra mente dardos de fuego. Éstos dardos pueden varear según sea nuestra debilidad. Ten en cuenta que él enemigo no mide rangos, ni respeta situaciones, él cuando nos tira, nos tira a matar; sin ninguna compasión, pues la compasión no existe en él.
Satanás se hará valer de situaciones, personas y de cosas para atacarnos y crear situaciones en las que él pueda enviar dardos a nuestra mente. Usará cosas sin resolver en nuestra vida para llevar acabo sus ataques. Pero no estamos solas, porque Jesús siempre está dispuesto a resolver todas éstas cosas en nuestra vida; pero primero debemos nosotras permitírselo.
Es sumamente importante que le permitamos a Dios trabajar en nosotras, en nuestro corazón sin ningún obstáculos, para que podamos vivir una vida cristiana saludable, victoriosa y prospera en nuestro amado Señor Jesucristo. Eso es tan importante chicas, que por eso en el estudio anterior (EB-S1 #002), estuvimos hablando sobre ello, para motivirles a permitirle a Dios que restaure tú corazón.
Conociendo la forma en la que él enemigo nos ataca, sabiendo de las cosas que se vale para ejecutar sus ataques y mandarnos contante dardos de fuego, es por lo que nosotras escogidas, debemos aprender a ser sabías. Debemos entender y reconocer que definitivamente no podemos estar vulnerables espiritualmente. Pero sí no tenemos un buen estudio diurno de la palabra, vamos a tener una vida espiritual débil y expuesta en sobremanera, a los ataques del enemigo.
Escogidas, seamos sabías y procuremos con diligencia comernos todos los días el rollo de vida que renueva nuestras fuerzas, que guía nuestros pasos y fortalecerá nuestra Fé; para que no tengamos una mente debil y podamos mantenernos furestes en Él Señor, firme en la verdad de su palabra ante cualquier situación. Sólo así podremos resistir a nuestro único enemigo, y derribar por la Palabra todo dardo en el Nombre de Jesus.
Debemos tener una vida alineada a la palabra de Dios para que al declarar Su Palabra, Él Señor nos respalde y ésta surja efecto y el enemigo tenga que abortar y salir corriendo en el Nombre de Jesús. Chicas nosotras debemos estar fuerte y bien alimentadas de la palabra, porque el enemigo no se detendrá; por tanto, nosotras tampoco nos debemos detener con el estudio de la palabra ni con la oración.
Si no leemos la Bíblica ¿como podemos tener fe en quien no conocemos (Jesús), cómo vamos a creer en lo que no sabemos?
La única forma es conociendo al dueño y proveedor de esa fe, conociendo la verdad de Su Palabra a través de la lectura continua cada día. Por eso debemos comernos el rollo como lo hizo Ezequiel (Ezequiel 3:1-3), y ésto no debe ser cosa de un día, porque así como nosotras alimentamos diariamente nuestro cuerpo físico, así mismo debemos también alimentar nuestro espíritu con lo del espíritu, la Palabra de Dios. Y aunque a veces se torna difícil porque la carne no quiere, nunca está dispuesta, pidamosle ayuda al que todo lo puede. Que nuestro esfuerzo unido a su ayuda nos dará la victoria.
Recuerda que la Palabra de Dios es vida, es victoria para nosotras; es la que nos provee de sabiduría para saber como afrontar cada situación, es la que fortalece y hace CRECER nuestra fe, es la que nos provee de herramientas de conocimiento estratégico para salir victoriosas ante los ataques y dardos que recibimos, es la que nos enseña como actuar diariamente en todo lugar; y sobre todo ante cuaqlquier situación que enfrentemos. La Palabra de Dios es la que nos corrige, nos limpia, nos moldea a Su forma y nos purifica; es la que nos hace de nuevo si fuere necesario para que podamos estar bien nutridos, fuertes y equipados para poder combatir los ataques, esos dardos que en cada situación recibimos en nuestra mente.
Sólo a través del escudo de la Fé podremos apagar los dardos de fuego del maligno, para obtener victoria en
él mismo campo de batalla.
Toda mujer escogida con proposito eterno debe saber que Satanás es padre de mentiras, y que a base de mentiras él usará todo lo que tiene contra ti y contra mi, para tratar de confundirnos distorcionando la verdad de Cristo con sus mentiras.
Los dardos que el enemigo envia a nuestra mente campo de batalla, están conformados por mentiras; porque con esos dardos de mentira, él tratará de robar en nosotras todo lo de Dios, entiendase: el gozo, la paz, la fe, la salvación, la esperanza; para en su lugar sembrar en nuestro corazón: dudas y miedo. ¿Y sabes porque? Porque la duda significa ausencia de fe en aquello por lo cuál estás dudando, y el miedo simplemente nos paraliza, nos detiene de avanzar en el Senor, trae angustia a nuestra vida y nos hace dudar y si dudamos es porque no confiamos.
Una vez que el enemigo te lanza el dardo del miedo a tu mente, éste produce duda y la duda comienza a arrancar la fe de nuestro corazón. Y sin fe chicas estamos muy vulnerables para ser atacadas y derribadas por el enemigo. Sí estás pasando por una situación así o conoces a alguien que este pasando por eso, entonces te invito a visitar o compartirle el siguiente enlace para ayudarle a recordar que nuestro Dios es justo y fiel para levantarnos y restaurarnos.
En conclusión, debemos recordad que Satanás es experto en disfrazar mentiras en verdad, para senbrar en nosotras miendo y que el miendo produzca duda, para así intentar debilitar nuestra fe y hacernos caer de la mano de Dios. Saber ésto, te dará ventaja ante los ataques del enemigo, para no creer sus mentiras.
Tu debes saber que todo lo que nos pueda causar dolor, furia, irá, etc... el diablo lo traerá a nuestros pensamientos para tratar de agudizar en nosotros esos sentimientos. Si tenemos falta de perdón, si el odio arropa nuestro corazón; él usará esas situaciones a su favor para nuestra destrucción.
Su plan es arrebatar de las manos de Dios, la mayor cantidad de vidas que le sean posible. Por eso debemos estar alerta, pues dichos dardos son lanzados según nuestra debilidad. Y debemos fortalecer esas áreas en la presencia del Señor. Recuerda que nadie lo hará por ti ni por mi; eso es algo que nos toca a cada una hacerlo, el fortalecer nuestra mente, el campo de batalla en la presencia del Señor a través de su palabra, para que podamos rebotar sus mentiras con la verdad de Cristo. Al instante que recibes el ataque, el dardo en tu mente, debes declarar la palabra de Dios para no darle lugar a que sus mentiras hagan nido en tu mente.
Y creame que funciona, porque hace unos años una hermana en la fe me había tratado muy mal y me había hasta cierto punto faltado e irrespetado. Y eso me dolió mucho, pero gracias a Dios yo rápido detecte que Satanás estaba usando esa situación para traer a mi corazón resentimiento y raíz de amargura. Pero cómo dice la Palabra de Dios:
Que de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; y como no sabemos qué debemos pedir, el Espíritu ora por nosotros con gemidos que no se pueden expresar con palabras. Y Dios, que conoce los corazones, entiende lo que el Espíritu dice, porque pide por nosotros de acuerdo a la voluntad de Dios.. (Romanos 8:26-27)
Y así fue, creo que esa intervención del Espíritu Santo hizo que él Señor ponga en mi corazon las palabras adecuadas para que orara como conviene a la voluntad de Dios; en cada momento que el enemigo me enviaba esos dardos a mi mente, al hacerme recordar dicha situación.
Mire mi hermana, cuando eso venía a mi mente yo soltaba lo que estuviera haciendo y me revestia del poder de Dios. Y con mis ojos cerrados y mis manos levantadas comenzaba a orar por unos minutos, declarando bendición sobre su vida, su hijo y familia. Yo empezaba a clamar por ella y por todas las situaciones de las que yo tenía conomimiento por las que ella atravesaba, e intercedia como si fuera para mí o mis hijos o mi esposo; y orando declaraba la palabra: tu palabra dice Señor... y por ahí me iba declarando la sobre su vida como si fuera para mi. Era tanto mi hermana, que yo hasta sudaba y templaba. Aleluya, hay poder en la palabra de Dios, gloria al Señor.
Y así lo hice cada ves que el enemigo me enviaba ese dardo recordandome lo que paso para tratar de lastimar mi corazón. Y le cuento mi amada hermana, que esa batalla en mi mente no duro 3 días... 😂rapidito el enemigo me soltó con eso, no le convenía porque su ataque lo que hacía era provocar un efecto contrario en mi. Por eso es importante conocer la palabra, para que sepamos que es lo que agrada a Dios y conforme a eso actuemos ante los ataques del enemigo, ante los dardos que envía a nuestra mente. Y el Señor nos dará la victoria.
El enemigo al ver mi determinación, al ver que en lugar de maldecirla la bendecia, al ver que en lugar de herirme y aflijirme yo intercedia en oración por ella y adoraba a Dios y declaraba su palabra; no le quedo mas remedio que soltarme con eso. Y jamás me volvió a molestar con esa situación, de eso ya han pasado 7 años. Desde entonces Dios me di paz ante esa situación y se llevó ese dolor y sano la herida que la hermanita me había causado gloria al Señor .
Con esa situación Dios me ensenoenseño una gran lección, me enseñó como pelear de su mano ese tipo de ataque. Y lo comparto contigo con la esperanza de que pueda ser de ayuda y bendición para ti. Y le pido a Dios que a partir de hoy tú puedas poner por obra (en práctica) lo que dice Romanos 12:2
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Mujer amada y escogida, hoy te invito a orar y pedirle a Dios que quite todos esos pensamientos negativos que satanás continua infiltrando en tus pensamientos. Le pido a Cristo que te de las fuerzas y la sabiduría para que le permitas a Dios transforar tu mente mediante renovación que sólo a través de Su Palabra podemos alcanzar.
Que la verdad de Cristo reemplace toda mentira y sus promesas remuevan toda inseguridad y negatividad que Satanás haya podido sembrar en tu mente y en tú corazón. Le ruego a Dios que cada día podamos permanecer firmes en la Fe de Cristo, con Gozo y Paz, con pureza, claridad y entrega. Que ningún dardo en nuestra mente nos haga dejar de confiar en Jesús, te lo pido Señor, Amen.
Amada, porfis no te vayas, sin antes contarnos en los comentarios que aprendiste a través de éste estudio. Espero nos podamos leer mañana a la misma hora 6:00 pm (hora de New York), para que continuemos con el estudio #003 de ésta serie EB-S1
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