Hablemos de la ansiedad

Éste mensaje fue publicado primero en mi antiguo blog Confía en Cristo

Hola, hola mis corazoncitos de fe, en esta linda tarde quiero compartir contigo un artículo que me pasaron por "dm" sobre la "Ansiedad", tema que me pareció de interés para todos, y por lo cual decidí compartirlo con ustedes mediante la sección del blog: "Hablemos De..."

Y es que muchos conocemos la ansiedad como un elemento obligatorio dentro del gran paquete que significa ser adulto. Viene en una cajita muy bien decorada y preparada que te hace creer que tal sensación de ansiedad es normal ante las situaciones de estrés que la provocan, sin embargo, lo que esa linda cajita no te muestra es el detonante que trae por dentro, pues está llena de múltiples síntomas que a medida que se vaya destapando te darás cuenta de las diversas problemáticas según sea la persona, su debilidad y situación, se manifestaran. Así de sutil y engañosa puede ser la ansiedad si no le prestamos atención y lo detectamos a tiempo.

Es duro enfrentarse uno mismo a las consecuencias que acarrean los síntomas que trae esa cajita de ansiedad, esto puede variar según ambiente y problemáticas adyacente al estrés que pueda presentar la persona; pero como todo, muchas veces, eventualmente nos acostumbramos a vivir con todos esos elementos que dicha cajita contiene cuando ignoramos lo destructiva que puede ser. Pues para algunas personas la ansiedad puede ser más peligrosa de lo normal. Pero veamos qué es la ansiedad en sentido general.

La Ansiedad


es un trastorno frecuente, con mayor incidencia en mujeres y jóvenes de 20 a 35 años aproximadamente, y puede llegar a ser incapacitante si no es tratada a tiempo. Pero es importante conocerla y aprender a identificarla si queremos aprender a lidiar con ella de la mejor manera posible para prevenir los impactos negativos que puede tener en nuestra salud.

Identifica a la ansiedad


Es muy importante que seamos conscientes de las señales que nos da nuestro cuerpo, que sabe muy bien dejarnos saber cuando algo no anda bien. Si bien es cierto que una cierta dosis de preocupación o angustia pueden ser normales, debemos tener en cuenta ciertos signos y síntomas que ameritan la visita a un especialista para descartar la presencia de un Trastorno por Ansiedad Generalizada. Algunos de estos síntomas son:

  • Estado de ansiedad y preocupación crónica
  • Sudoración
  • Palpitaciones
  • Dolor de cabeza
  • Inquietud
  • Irritabilidad

Que no cunda el pánico



Otra forma en la que se manifiesta la ansiedad es a través de los ataques de pánicocaracterizados por la aparición temporal y aislada de miedo intenso. De inicio brusco, alcanza su máximo pico en los primeros 10 minutos. Los ataques de pánico vienen acompañados de 4 o más de los siguientes síntomas:

  • Palpitaciones, Taquicardia
  • Sudoración profusa
  • Temblores
  • Sensación de ahogo
  • Sensación de atragantamiento
  • Opresión o dolor torácico
  • Náuseas o molestias abdominales
  • Mareo, Desmayo o Inestabilidad
  • Miedo a perder el control o a perder la razón
  • Miedo a morir
  • Hormigueo
  • Escalofríos o sofocaciones
  • Desrealización (sensación de irrealidad) o Despersonalización (estar separado de uno mismo)

Vencer al miedo



Como podemos observar en ambos casos el miedo es un común denominador, pero ¿Sabemos realmente qué es?

El miedo es una especie de alarma que se activa en el cerebro ante un peligro inminente, lo cual activa la Respuesta de Lucha o Huida (básica para la supervivencia). Muchas veces el peligro puede ser real pero también pensado, imaginado. Y precisamente ahí está el problema, pues cualquier preocupación cotidiana puede activar de manera desmesurada esta respuesta. 

De esa manera, el cerebro funciona en modo "híper", respondiendo velozmente ante cualquier estímulo y se descontrola.

Te propongo un ejercicio muy sencillo pero con muchísimos beneficios que te puede ayudar, al experimentar, un ataque de pánico:

  1. Inhala por la nariz expandiendo el abdomen por 4 segundos
  2. Mantén el aire por 7 segundos
  3. Exhala por la boca contrayendo el abdomen por 8 segundos

Repite este ejercicio 2 o 3 veces (o hasta encontrar la calma). Esta técnica hace que el Sistema Nervioso Autónomo cambie de una respuesta "simpática" (lucha o huida) a una "parasimpática" calma. Así que recuerda, a respirar y traer nuevamente la calma a tu mente. Recuerda que si presentas alguno de los síntomas arriba mencionados no dudes en acudir a una consulta con tu médico, no lo dejes pasar por alto... pero sobre todo, presentarlo al Señor en oración, que es el médico por excelencia.

  • Te has sentido asi en algun momento?
  • Qué medidas tomaste al respecto?

Comparte con nosotros mediante los comentarios tu experiencia, posiblemente pueda ser de ayuda para otros que estén pasando por la misma situación. Anímate y testifica :) Por cierto, si te gusta la imagen gif al inicio de este post puedes descargarla mediante este enlace.

Gracias a Ange vía Estar Bien

Con amor, Vanessa Sev D'Martinez ೃ༄*ੈ✩
2 0 2 4 © ARTIZVNOVA

Publicar un comentario

Escogida, puedes aprender AQUI como agregar un gif, video o enlace activo en los comentarios. Y recuerda, que todos los comentarios son moderados antes de ser publicados en línea. Nota: Los comentarios anónimos no estan permitidos.